Distintas situaciones cotidianas pueden implicar la necesidad de presentar un apto físico. La más común de ellas es la del apto físico deportivo, al momento de inscribirte en un nuevo gimnasio o club de deportes. 

Si bien se trata de un certificado sin complejidad que cualquier médico clínico puede extender a su paciente, recopilamos algunas características y datos importantes para que tengas en cuenta al momento de avanzar en su confección y presentación.

¿Qué es un apto físico?

Un certificado de apto físico es un documento (de 1 año de duración) que contiene una evaluación médica integral de una persona, con la finalidad de detectar factores de riesgo, descartar condiciones clínicas de riesgo potencial durante una práctica deportiva y evaluar el estado cardiovascular.

Este certificado solo puede ser firmado por un médico especialista matriculado y debe contar con algunos puntos como:

  • Interrogatorio general.
  • Examen físico.
  • Electrocardiograma de reposo.
  • Análisis de la alimentación e hidratación actual.
  • Análisis de sangre y orina (opcional).
  • Ecocardiograma (sirve para ver la forma, tamaño y movilidad del corazón, además de sus válvulas, chequeando si existen o no malformaciones).
  • Prueba de esfuerzo o ergometría, por lo general realizada en una cinta o bicicleta fija (este estudio permite chequear cómo se comporta el corazón ante esfuerzos típicos en un gimnasio).

Más allá de estas consignas generales, cada apto físico podrá requerir estudios particulares o indicaciones médicas directamente relacionadas con el tipo de actividad que se llevará a cabo, o las condiciones en las que se encontrará la persona al momento de realizarlas.

Apto Físico

¿Para qué sirve un apto físico?

El certificado de apto físico es fundamental para verificar que una persona se encuentra en condiciones óptimas para realizar una actividad determinada y, en pocas palabras, contar con un recurso para salvarle la vida.

Es por eso que no sirve pedirle la firma de este certificado a un “médico amigo” o realizar las evaluaciones sin compromiso y real dedicación.

Gracias al certificado de apto físico, profesores, dueños de casas deportivas, entrenadores y otros profesionales han podido adaptar sus prácticas y actividades a pacientes con afecciones, mareos, pérdidas de conocimiento, etc.

Estos profesionales saben a qué síntomas prestar atención durante una rutina, como los dolores de cabeza o las complicaciones por el sobrepeso.

Todas las personas deberían tener acceso a una rutina deportiva saludable y acondicionada según sus características físicas y su estado de salud actual. La solicitud de apto físico es una obligación que muchas instituciones deberían respetar y que todos los gobiernos deberían regular de forma estricta.

¿En qué situaciones es común que soliciten un apto físico?

La situación más frecuente es la del apto físico para gimnasio. Si bien no es un requisito obligatorio en todas las provincias y países (puede variar), sí es fundamental que, antes de comenzar a realizar actividad deportiva, un profesional haga al menos una serie de consultas básicas sobre las condiciones de su nuevo cliente registrado.

Otras organizaciones que solicitan apto físico son los colegios, instituciones educativas terciarias y, en ocasiones, compañías que se dedican a vender excursiones de alto riesgo o impacto moderado. 

Muchas veces no es suficiente con el testimonio de la persona y realmente es importante contar con un documento firmado por un médico profesional y matriculado que pueda ser responsable del estado de salud del paciente y su capacidad de ejercitar determinada actividad. 

¿Necesitás un certificado de Aptitud Física?

En GENEA extendemos los certificados de apto físico necesarios para comenzar la rutina, con el objetivo de establecer la condición física del paciente, tanto en practicantes recreativos como en deportistas experimentados y competitivos.

A través de distintos métodos de diagnóstico te daremos un panorama integral de tu estado de salud para que cuentes con la tranquilidad necesaria para realizar tus próximas actividades. 

Dr. Enrico Casco (MN 134625), médico especialista en diagnóstico por imágenes, Director Médico de Genea Imágenes y Centro Médico y médico de planta del Servicio de Tomografía Computada del Hospital Enrique Tornú. Realizó su especialización en el Hospital Militar Central y actualmente se encuentra cursando la Maestría en Gestión de la Salud de la Universidad de San Andrés.
Enrico Casco